La osteoporosis es una enfermedad silenciosa, que a menudo no muestra signos o síntomas hasta que ocurre una fractura, lo que deja a la mayoría de los pacientes sin diagnóstico y sin tratamiento.

Es una disminución significativa en la densidad mineral ósea (DMO) y cambios estructurales en el hueso que aumentan en gran medida el riesgo de fractura.

La osteoporosis se define operacionalmente por el nivel de masa ósea, medido como DMO.

Según la Organización Mundial de la Salud, la osteoporosis se define como la DMO con > 2.5 desviaciones estándar por debajo de la DMO promedio de adultos jóvenes, calculada como un T-score de -2.5

La Organización Mundial de la Salud y la Fundación Internacional de Osteoporosis recomiendan que la tecnología de referencia para el diagnóstico de la osteoporosis sea la absorciometría de rayos X de energía dual (DXA) aplicada al cuello femoral

• El cuello femoral es el sitio preferido debido a su mayor valor predictivo para el riesgo de fractura

• La columna vertebral NO es un sitio adecuado para el diagnóstico en personas mayores debido a la alta prevalencia de cambios degenerativos, que artefactualmente aumentan el valor de la DMO;

     o sin embargo, es el sitio preferido para evaluar la respuesta al tratamiento

NO SE RECOMIENDA EL USO DEL ULTRASONIDO CUANTITATIVO

El riesgo de fractura por osteoporosis a los 50 años de edad se estima

• entre 13-22% en los hombres

• y 40-53% en las mujeres de los países occidentales.

Los sitios comunes de fractura por fragilidad incluyen:

• los cuerpos vertebrales,

• el radio distal,

• el húmero proximal,

• la pelvis

• y el fémur proximal.

EN ESPAÑA

• En 2010, se reportaron aproximadamente 204,000 nuevas fracturas por fragilidad en España.

• La carga económica de las fracturas nuevas y anteriores ascendió a 2.842 millones de euros cada año;

para el año 2025, la carga aumentará en un 30% hasta los 3.680 millones de euros.

A NIVEL MUNDIAL

La incidencia anual de fracturas osteoporóticas es más alta que la del accidente cerebrovascular, ataque cardíaco y cáncer de mama combinados.

• Las fracturas osteoporóticas también representan más hospitalizaciones y costos asociados que las enfermedades cardiovasculares y el cáncer de mama.

Fármacos para el tratamiento de la osteoporosis

Dos grupos

1. Antirresortivos: impiden o ralentizan la pérdida de hueso, actuando sobre el Osteoclasto (destructor de hueso)

• Bisfosfonatos

• Denosumab, anticuerpo monoclonal humanizado que inhibe la unión del receptor activador del ligando del factor nuclear κB (RANKL) a su receptor en el   osteoclasto

2. Formadores de hueso

• Teriparatida, [hormona paratiroidea humana recombinante (1-34), rhPTH1-34]. Actúa sobre los osteoblastos (formador de hueso)

• Abaloparatida, medicamento análogo a la proteína paratiroidea relacionada con la hormona (PTHrP), fue aprobado por la FDA en mayo de 2017

• Romosozumab, anticuerpo monoclonal que se une e inhibe la esclerostina

    o La esclerostina es secretada por los osteocitos para modular la renovación ósea. Inhibe la formación de hueso al inhibir la diferenciación     osteogénica de células madre y la proliferación de osteoblastos. También estimula la secreción de RANKL a partir de los osteocitos.

    o En julio de 2017, la FDA rechazó la presentación de Romosozumab debido a preocupaciones sobre posibles efectos secundarios cardiovasculares.        Pendiente de nueva presentación a la FDA.

REFERENCIAS

Amir Qaseem et al. Treatment of Low Bone Density or Osteoporosis to Prevent Fractures in Men and Women: A Clinical Practice Guideline Update from the American College of Physicians. Ann Intern Med 2017 Jun 6;166(11):818-839

Pui KitSuen and LingQin. Sclerostin, an emerging therapeutic target for treating osteoporosis and osteoporotic fracture: A general review. Journal of Orthopaedic Translation 2016; 4:1-13

Saag KG, Petersen J, Brandi ML, et al. Romosozumab or alendronate for fracture prevention in women with osteoporosis. N Engl J Med. 2017;377:1417-1427.

Traducido, resumido y comentado

PROF. DR. FERNANDO GALAN